EL FINAL DE LA GUERRA EN EUROPA
Los aliados emprendieron una ofensiva sobre las líneas alemanas establecidas en Amiens (del 8 al 11 de agosto); los alemanes se rindieron tres meses después. Las fuerzas británicas y francesas ganaron la segunda batalla del Somme y la quinta batalla de Arras durante la última semana de agosto y los primeros días de septiembre, e hicieron retroceder a los alemanes hasta la Línea Hindenburg.
El resto de las tropas alemanas fue reducido por los estadounidenses en la batalla de Saint-Mihiel (12 y 13 de septiembre). Los británicos avanzaron hacia Cambrai en octubre y principios de noviembre, y los estadounidenses atravesaron el bosque de Argonne. El último ataque logró romper las líneas alemanas establecidas entre Metz y Sedan. Como resultado de estas ofensivas, Ludendorff pidió al gobierno alemán que solicitara un armisticio al enemigo. El gobierno alemán inició las conversaciones con los aliados (octubre), pero éstas fracasaron cuando el presidente Wilson insistió en negociar únicamente con regímenes democráticos. Mientras tanto, los británicos realizaban importantes progresos en el norte de Francia y a lo largo de la costa belga, y las tropas francesas y estadounidenses llegaron a Sedan el 10 de noviembre. La Línea Hindenburg había sido completamente aniquilada a comienzos de este mes, y los alemanes se retiraban con rapidez de todo el frente occidental. La derrota del ejército alemán tuvo repercusiones en el interior del país que afectaron de forma muy negativa al gobierno establecido. La flota alemana se amotinó, el rey de Baviera fue destronado por un levantamiento y el emperador Guillermo II abdicó en noviembre y huyó a los Países Bajos. El día 9 de ese mismo mes se proclamó la República de Weimar en Alemania, cuyo gobierno envió una comisión para negociar con los aliados. A las cinco de la mañana del 11 de noviembre tuvo lugar en el bosque de Compiègne la firma del armisticio entre Alemania y los aliados; este documento estaba basado en las condiciones establecidas por los vencedores; esa misma mañana cesaron las hostilidades en el frente occidental.
El resto de las tropas alemanas fue reducido por los estadounidenses en la batalla de Saint-Mihiel (12 y 13 de septiembre). Los británicos avanzaron hacia Cambrai en octubre y principios de noviembre, y los estadounidenses atravesaron el bosque de Argonne. El último ataque logró romper las líneas alemanas establecidas entre Metz y Sedan. Como resultado de estas ofensivas, Ludendorff pidió al gobierno alemán que solicitara un armisticio al enemigo. El gobierno alemán inició las conversaciones con los aliados (octubre), pero éstas fracasaron cuando el presidente Wilson insistió en negociar únicamente con regímenes democráticos. Mientras tanto, los británicos realizaban importantes progresos en el norte de Francia y a lo largo de la costa belga, y las tropas francesas y estadounidenses llegaron a Sedan el 10 de noviembre. La Línea Hindenburg había sido completamente aniquilada a comienzos de este mes, y los alemanes se retiraban con rapidez de todo el frente occidental. La derrota del ejército alemán tuvo repercusiones en el interior del país que afectaron de forma muy negativa al gobierno establecido. La flota alemana se amotinó, el rey de Baviera fue destronado por un levantamiento y el emperador Guillermo II abdicó en noviembre y huyó a los Países Bajos. El día 9 de ese mismo mes se proclamó la República de Weimar en Alemania, cuyo gobierno envió una comisión para negociar con los aliados. A las cinco de la mañana del 11 de noviembre tuvo lugar en el bosque de Compiègne la firma del armisticio entre Alemania y los aliados; este documento estaba basado en las condiciones establecidas por los vencedores; esa misma mañana cesaron las hostilidades en el frente occidental.
LA GUERRA EN LAS COLONIAS
No hay comentarios:
Publicar un comentario